En el 2007 ha sido diseñado y realizado el primer dispositivo de zona única de detección, basado en una antena biestática planar con una superficie de 1150 mm (W) x 900 mm (L). Los bobinas de antena han sido colocadas en el interior de un contenedor plástico, sellado con resinas apropiadas. La antena ha sido fijada a la estructura del ROV mediante una torre de tubos de acero inoxidable AISI316 y la estructura ha sido calculada a modo que su peso esté balanceado en agua por el empuje hidrostático de las partes huecas.

La central electrónica, ubicada en el interior de un contenedor de acero inoxodable AISI316, sellado y llenado con resina, ha sido conectada al sistema de antena mediante un cable apropiado para el ejercicio a presión alta; un segundo cable de características similares alimenta el Metal Detector mediante la tensión continua suministrada por la central del ROV.

El sistema, basado en la transmisión/recepción de un campo electromagnético de baja frecuencia, es sensible a blancos constituidos de metales magnéticos y no magnéticos y se caracteriza por una adaptabilidad elevada a terrenos mineralizados.

Las operaciones pueden ser guiadas por un barco de superficie, conectado al ROV a través de alambre, con la ayuda de un sistema de orificios y cámaras de televisión que permite visualizar los objetos visibles y evitar los obstáculos como troncos o rocas.